Una excitación representa la aplicación súbita de una fuerza u otra forma de perturbación, que se traduce en una respuesta transitoria de un sistema.

El valor máximo de la respuesta es una buena medida de la dimensión de la excitación y es, por supuesto, dependiente de las características que tenga el sistema.

Con el objeto de caracterizar todos los tipos de excitaciones y estudiar los valores máximos de la respuesta, un sistema de un grado de libertad se eligió como sistema estandar.